La llaman ‘La monalisa’ por su método poco tradicional de mantener su cutis libre de arrugas. Sin embargo, Tess Christian, confiesa que no sonreír le ha traído serios problemas familiares. Conoce su historia:
Para la mayoría de mujeres a veces el paso del tiempo resulta ser un ‘enemigo’ difícil de combatir. Rutinas como mascarillas, masajes, cremas hasta las invasivas cirugías plásticas o el novedoso peeling, son métodos perfectos para un cutis libre de arrugas. Sin embargo, una mujer llamada Tess Christian, de 50 años tomó la drástica decisión de no sonreír, desde los 10 años se juró no formar en sus labios la curva de la felicidad. Los resultados sorprendieron a todos.
Según Tess Christian ha descubierto la fórmula de la felicidad, pues a su medio siglo de vida mantiene completamente liso el rostro. Sin embargo, su vida se ha convertido en un sombrío episodio, su familia da cuenta de ello y los momentos que tuvo que pasar sin sonreír así sucediera algo importante.
“No tengo arrugas porque me he entrenado para controlar mis músculos faciales. Todo el mundo pregunta si me he puesto bótox, pero no lo he hecho”, comentó la mujer a un medio local.
No sonreía ni cuando era adolescente y asistía a reuniones que merecían un poco de alegría y diversión. “no me he reído o sonreído desde que era una adolescente. Mi dedicación ha valido la pena, no tengo ni una sola línea en mi cara”, comentó.
Tess confiesa que no sonreír le ha traído más de un problema en su vida familiar; sin embargo, reafirma en su posición que es un método poderoso y eficaz por encima del artificial botox.
“Sabemos esto porque es exactamente cómo funciona el botox, al reducir la actividad muscular. No sonreír es una opción de bricolaje, aunque hubiera pensado que era difícil mantener el ritmo”, comentó.
Una cara lisa y limpia.
