Hace tres meses, la tarde del 18 de octubre de 2018, Miladis (nombre cambiado), una estudiante de 16 años, no volvió a su casa. Ella junto a su familia residía en un municipio del paracentral departamento de La Paz, donde se ubica el centro escolar donde ella cursaba el tercer ciclo.

“Se fue a la casa de una compañera a hacer un deber escolar”, “Se fue con un muchacho bajito y pechito” o “Ella no vino a clase” fueron las versiones que le proporcionaron a la angustiada madre al llegar a la escuela a la mañana siguiente a preguntar por su hija.

Ante el desconcierto y la aflicción que le provocó su desaparición, el 20 de octubre la madre se dirigió a la oficina regional de la Fiscalía General de la República (FGR) a interponer la denuncia por desaparecimiento.

La mañana de ayer miércoles 16 de enero, un equipo de la Sección Táctica Operativa (STO) de la Policía Nacional Civil (PNC) rescató a la menor y detuvo a su raptor en una vivienda del cantón Espino Abajo, a las afueras de la cabecera Zacatecoluca.

 Se trata de José Ricardo Saravia Martínez (31) alias Mecha, un pandillero que permanecía escondido en el lugar, sin trabajar, que alegó ante las autoridades mantenerse “encaletado” (escondido) por temor, a raíz de haberse retirado de la pandilla 18S.

En las próximas horas el delincuente pasará a manos de un juzgado, acusado, inicialmente, del delito de estupro.

Mientras que la menor liberada pasará a manos de la FGR y del Consejo Nacional de la Niñez y de la Adolescencia (CONNA).

Recientemente el director general de la PNC, Howard Cotto, anunció la conformación de una comisión interinstitucional entre la Policía, FGR y el Instituto de Medicina Legal (IML) para, entre otros puntos, evitar la desinformación existente en torno a la cifra de las denuncias de personas desparecidas.

Son casos complejos, dijo en esa oportunidad el jefe policial.
Al carecer de una entidad que le brinde el respectivo seguimiento a cada caso es difícil, por ahora, manejar la verdadera cifra de personas desparecidas que, como en el caso de Miladis, no fue tal.


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