La Policía de Filadelfia fue alertada por la presencia de una extraña bolsa negra en el exterior de un edificio, y todos pensaron que podría tratarse de una bomba, sin imaginar que sería algo peor.
Al principio pensaban que se trataba de una bomba, pero el horror se vivió después.
Un sorprendente y macabro hecho fue registrado en Filadelfia, debido a que los vecinos de un edificio se dieron con la sorpresa de que una enorme bolsa negra había sido abandonada en el exterior, y rápidamente alertaron a la Policía de la zona.
Muchos pensaron que podría tratarse de un atentado, o una bomba dentro; sin embargo, con la llegada de los efectivos, se descubrió que el interior contenía algo peor y descubrieron que se trataba de un cajón de bebé, dejando a todos totalmente mudos.
Pese a lo sorprendente de la historia, lo peor aún no había llegado y es que al abrir el cajón se dieron con la sorpresa que no había ningún pequeño dentro, pero sí hallaron órganos humanos, causando terror en todos, y lo peor fue que confirmaron que ambos eran de niños.
“De acuerdo con el médico forense, efectivamente se trataba de órganos humanos. Creían que pertenecían a un infante o un niño. Lo que es inusual es dentro del ataúd, aparte de la bolsa de órganos, no había un cuerpo“, manifestó el jefe de la Policía de Filadelfia Scott Small.
Tras la noticia, las hipótesis no dejaron de surgir y se cree que habría sido robado de una funeraria cercana o fue excavado de alguna tumba reciente.
