Verdaderamente un enfermo al 100%,.
Eric Masters fue condenado a 200 años de prisión por violar a una pequeña niña de tan solo un año y medio de edad.
Dentro de los escabrosos detalles que presenta este caso está el hecho de que este sicópata se grabó a si mismo, violando y orinando a esta pequeña, tras haberla amarrado a una cama de la habitación de un hotel.
Agentes de la FBI fueron quienes descubrieron este terrible caso a través de un seguimiento que le hacían Masters por delitos sexuales cometidos antiguamente y se percataron de este brutal acto al revisar su computador y encontrar el registro de este hecho.
Se cree que este criminal utilizaba este registro para compartirlo con otros pedófilos y obtener así nuevo material pornográfico de estas características, además de eso también lo vendía a otros enfermos igual que el que pagaban miles de dólares por el material.
La madre de la menor, declaró al Tribunal de Kent Country de Michigan, que espera que este hombre jamás salga de la cárcel. Además señaló que “Este hombre condenó a mi hija a una cadena perpetua que jamás olvidará”.
The Sun
