Las relaciones sexuales entre las parejas pueden pasar por una crisis y de no saber resolverlo, se debe acudir a un experto para que los ayuden.
Las relaciones de parejas, por lo general, empiezan con todo el entusiasmo y ganas de hacer de todo, viajar, conocer, comer, bailar y por supuesto, hacer el amor. En los primeros meses de relación la intensidad sexual es bastante alta, pero con el pasar del tiempo puede llegar a decaer, ¿por qué ocurre ello? Unas expertas responden.
“Para muchas parejas —por no decir para la mayoría—, el sexo representa una forma importante de conexión íntima, en términos físicos por supuesto, pero también en lo que al estado emocional respecta”, dice Amanda Gesselman, psicóloga social e investigadora científica del Kinsey Institute.
“Aunque no se ha demostrado que sea cierto, la satisfacción con nuestra vida sexual, por lo general, suele estar vinculada a lo felices que nos sentimos en nuestra relación. Por esta razón, no es de extrañar que cuando el apetito sexual de nuestra pareja empieza a decaer —quizás porque está estresada, deprimida, cansada, o porque la frecuencia de las relaciones sexuales tiende a decrecer a medida que la relación avanza—, interpretemos esa decaída como que algo va mal”, agrega la experta.
Gesselman recalca que una decaída en el apetito sexual no siempre está relacionada con el amor que hay entre las parejas. “Una persona podría tomarse esta decaída como una señal de que su pareja no la ve tan atractiva o no quiere estar con ella, aunque nada de eso sea cierto”, explica.
En tanto que Vanessa Marin, terapeuta sexual, sostiene que es un problema común que la intensidad de los sentimientos que aparecen cuando no se practica sexo suele sorprender incluso a quien los experimenta:
“Da la sensación de que muchas parejas piensan que el sexo es única y exclusivamente sexo”, dice Marin, “pero es mucho más que eso. Tu pareja no se te insinúa solo porque quiera tener un orgasmo. Está claro que esa es la parte divertida del sexo, pero lo necesario es priorizar a tu pareja y vuestra relación sobre las otras muchas cosas que intentan distraer nuestra atención”, dijo.
¿Qué hacer si el sexo decae? Ambas expertas concuerdan que lo más importante es la comunicación, no importante que tan incómodo o extraño pueda ser:
Marin ayuda a que las parejas entiendan que no se trata de que nunca se rechacen el uno al otro a la hora de practicar sexo, sino de que sean capaces de entender y procesar los sentimientos que acompañan ese rechazo.
Eso permite a la pareja hablar de forma más sincera y clara de sus deseos. Todo esto conlleva menos discusiones, más tiempo juntos y mucho menos rencor.