Bonnie y Clyde lograron convertirse en una pareja criminal con más fama en el mundo; sin embargo, su final fue demasiado terrible, ya que las autoridades solo querían eliminarlos.
Bonnie y Clyde son dos nombres que han logrado pasar a la historia, debido a que la pareja se convirtió en la dupla más buscada por sembrar el terror en 1934 con sus fechorías, por ello las autoridades los buscaron por todo Estados Unidos y su fama terminó extendiéndose en el mundo.
Sus nombres eran Bonnie Elizabeth Parker, y Clyde Barrow, quienes estaban muy enamorados y también amaban el crímen, ya que la pareja desafiaba a la ley en todo momento y amaban el riesgo que corrían, por ello los consideraban como los Romeo y Julieta de su época, pero dedicados a los robos.
Barrow era un exconvicto nacido en 1909 y el 4 hijo de una familia de 8 herederos, mientras que Bonnie nació en 1919 y era la segunda de tres hijos. Los destinos de ambos se cruzaron entre 1931 y 1934, época en la que recorrieron el suroeste de los Estados Unidos sembrando el terror.
Ellos asaltaban bancos, secuestraban personas y también asesinaban, pero todo lo hacían juntos. Ella era una mujer sumamente hermosa, con una cabellera pelirroja que podría seducir a cualquiera, pero sus desórdenes psicológicos provocaron que caiga en el juego de él.
SU TRÁGICO FINAL
Vivir inmersos en el peligro los llevó a ser los más buscados por la justicia. Fue 1934 el año en que 6 oficiales de Lousiana y Texas los esperaban detrás de la maleza de una carretera, y al tenerlos en zona de tiro, ellos no dudaron en acribillarlos. En total dispararon 167 proyectiles con la intención de ponerles fin.
“Abrí la puerta del auto, y vi a la muchacha en medio de la sangre, pero aún olía a perfume y su peinado no se había arruinado. Sobre el piso del Ford estaban la pistola con la que Bonnie había alcanzado a disparar, un mapa de carreteras de Louisiana, y el sándwich a medio comer. En el auto se encontraron, también, muchas municiones, algunos elementos de camping, el saxo de Clyde, y quinientos dólares. Había, también, algunas patentes de autos falsificadas de Texas, Louisiana y Arkansas”, indicó uno de los policías que estuvo en la trampa, revelando así el trágico final de la pareja.