La mujer creyó que le iba a salir un grano en su cara, pero en realidad era una señal de una terrible enfermedad, las consecuencias son aterradoras.
Kari Cummins de 35 años creyó que el pequeño bulto que le salió en el rostro se trataba de un grano o una espinilla, así que no le prestó tanta atención. El bulto empezó a crecer considerablemente y Kari se asustó, así es que acudió al dermatólogo, quien, después de revisarla, le dijo que se trataba de carcinoma, una forma de cáncer que se origina en células de tipo epitelial o glandular.
El bulto que crecía en el rostro de Kari era maligno, es por eso que los especialistas decidieron extirparlo de forma inmediata y someterlo a una biopsia. La intervención fue exitosa y para suerte de la mujer, no se trataba de un tipo de melanoma que permita la extensión a otros órganos.
Sin embargo, los médicos no pudieron evitar que Kari quede con un gran agujero en su rostro, a la altura de su mejilla. Para cerrar tamaña abertura, los especialistas necesitaron de 35 suturas.
La mujer reconoció que acudió por 10 años a camas de bronceado y expuso demasiado su piel al sol.
“Ahora entendí que no hace falta gran exposición a los rayos UV para llegar a desarrollar un carcinoma.
“Admito que descuidé mi piel y ahora debo afrontar las consecuencias”, dijo Kari. La mujer también aconsejó no quedarse callado ante una situación similar. “En un inicio sentí mucho miedo, pero ahora me siento empoderada sobre la situación, ya que puedo usar mi experiencia y compartir mi historia con la esperanza de que otros tomen consciencia sobre su piel”.
Kari Cummins señaló que tras la aparición del bulto en su mejilla, otros han emergido en otros sectores de su rostro, los cuales también deberán ser removidos.
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