Ser el “poste” de la pandilla es un trabajo de vida o muerte, su responsabilidad es vigilar quien entra y sale de su sector, el más mínimo descuido puede llevar a la muerte.
Y así fue lo que sucedió a este miembro de la Pandilla 18, el sujeto era precisamente el encargado de vigilar la entrada y salida de su colonia, pero su vida llegó a su fin esta madrugada.
El sujeto fue identificado como Wilber Cruz de 31 años, y controlaba la colonia El Paraíso en Usulután.
Según reportes, la mano criminal de sus enemigos, la MS estaría involucrado en su muerte.
Hoy su cuerpo apareció ensangrentando luego de que le dieran muerte en horas de la mañana.
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