Todos los días nos enteramos de nuevas historias que muestran, lamentablemente, el abuso de poder que existe en algunas esferas de la sociedad; pero esta historia si bien tiene como protagonista a reclusa y a una jueza, la mujer que ejerce poder ocupa su puesto para defender a la convicta que tenía en frente.

En julio de 2016, la jueza Amber Wolf se preparaba para discutir el caso de una mujer acusada de robo. Todo iba normal, hasta que se fijó en el atuendo que ella llevaba.

La mujer que estaba delante de ella llevaba tres días en la cárcel, y no llevaba pantalones: le habían denegado el acceso a ellos. También a los productos de higiene femenina.

La jueza quedó en shock, estaba indignada por el trato que le habían dado a la mujer. Cómo eso era posible.

Tal como reporta Inside Edition, estas fueron las palabras de la jueza:

“¿Discúlpame? Esto es indignante. ¿Esto es real? “, Preguntó desde el banquillo. “Estoy en la dimensión desconocida?, ¿Qué está pasando? “, exclamó.

Luego llamó a los funcionarios del lugar para exigir una explicación: “Esto es completamente inhumano e inaceptable”, dijo. Después de cortar el teléfono, se disculpó con la reclusa.
La jueza al examinar el caso de la mujer, en vez de darle más tiempo en la cárcel, Wolf decidió entregarle una multa de 100 dólares y otorgarle la libertad.

Mira un reporte del caso aquí:

upscol


Loading...