Bajar de peso se vuelve una obsesión cuando uno quiere tener el cuerpo perfecto y una necesidad cuando la salud está en riesgo. La obesidad puede ser producto de un mal hábito alimenticio o por un tema genético, como el caso de Ella Resiga, una mujer que quiso romper con el mal que aquejó a toda su familia. La mujer hizo una dieta extrema.
Cuando Ella tenía 13 años, llegó a pesar 170 libras. La mujer evitaba consumir comida chatarra; sin embargo, siempre comía porciones grandes de comida.
Ella no baja de peso y se alarmó cuando el doctor le dije que si no cambiaba su hábito alimenticio, podría vivir gorda por toda su vida.
En un viaje a Romania, su tía, Sofía Ciulei, le dio la receta para poder perder peso: uvas. Ella comió 10 uvas diarias y pollo hervido y bajó 80 libras y luce totalmente diferente. La mujer ha compartido fotos del antes y después de someterse a la estricta dieta. Sin embargo, no todo estaba bien.
L os doctores le han alertado de que no es para nada sana su elección. Los nutricionistas le recomiendan continuar con una dieta más balanceada. Ella ha hecho caso a las recomendaciones y ha empezado a comer como cualquier otra persona, pero en pequeñas cantidad para no recaer.
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